Nota del editor
Los ALC promueven el comercio exterior; pero ante un dólar planchado, aún mejor es bajar, en serio, costos internos
En estas últimas semanas a partir de la Cumbre del Mercosur de Montevideo el tema del futuro del bloque y la necesidad de establecer acuerdos de libre comercio con otros países en forma unilateral de sus miembros, estuvo plasmado ahora por Argentina y antes por Uruguay y fue reflejado en los medios masivos, cosa que como es habitual, desaparece con los días. Otro tema que vuelve a repetirse, es el hincapié de algunos sectores productivos – unos con más sutileza, otros más directos- es el del “atraso del tipo de cambio”.
Si la variable es anclar el dólar como un arma para frenar la inflación, y no contar con un “tipo de cambio competitivo”, al menos “bájame los costos internos y los impuestos”, dicen. Cuestión recurrente en la Argentina, hasta el hartazgo. Pero la audiencia se renueva.
Será más fácil pelear por una "devalueta" que por bajar costos?.
Sólo un caso: cuando el esquema del 1 a 1 menemista no daba para más, en una charla con un emprendedor que trabajaba con pymes exportadoras de valor agregado, aquél insistía en que la solución no era la devaluación y cerrar la economía – cosa que explotó tiempo después- sino bajar costos y establecer mejoras competitivas. La posibilidad de la importación de insumos para luego exportar era el esquema ideal para que se desarrollen las pymes, decía nuestro interlocutor, que luego del fin del 1 a 1 votado con orgullo por el Congreso Nacional, se terminó volviendo a su país de origen ante el desastre.
Pero si hablamos de acuerdos de libre comercio; sólo a través de ellos se puede generar un salto en el comercio exterior y en las exportaciones en particular?
Es sabido que Chile basó su expansión en determinados productos, especialmente la fruticultura con acuerdos de libre comercio con las principales economías del mundo, pero Brasil, por ejemplo, expandió su comercio exterior y sus exportaciones en particular en forma exponencial, siendo uno de los países más proteccionistas del mundo y por estos días, incluso esta firmando una serie de acuerdos para acceder mejor a mercados no tradicionales.
Frutas
Precisamente el presidente argentino, en la reunión de Montevideo, tomó como ejemplo del “corset del Mercosur”, como impedimento del crecimiento de las exportaciones y a que gracias a su política comercial de acuerdos de libre comercio, Chile exporta 50 veces más cerezas que la Argentina.
Pero esto se debe principalmente a las ataduras del Mercosur o más a las políticas económicas que incluso en la actualidad existen referidas a la producción frutihortícola?
Más allá de que se trata de un sector que históricamente ha tenido sus altas y bajas, los notables esfuerzos de productores tanto en las frutas ya tradicionales como en más nuevas como arándanos o cerezas, han venido chocando con la incomprensión oficial y la competitividad perdida, no sólo frente a países como Chile, sino el mismo Perú, que manejan volúmenes enormes. La Argentina con su escaso volumen, se quedó con el argumento de apuntar a “mercados nicho de calidad”.
De hecho, no hay tanta diferencia en el arancel que debe pagar la Argentina para acceder al mercado chino en ciertas frutas respecto a Chile. El problema, más que en los acuerdos, entienden especialistas del sector, "está adentro". Los costos laborales en una actividad donde 60% del costo es mano de obra intensiva y la carga impositiva, hacen inviable la fruticultura. Se trata de costos de los más altos a nivel internacional y más aún si se los compara con la competencia del hemisferio sur. Mientras que el ingreso de un embalador en Chile está en U$700 impuestos incluidos hace 15 años, en Argentina viene teniendo un valor promedio desde hace 10 años de U$1100 y que ahora llega al máximo de más de U$1600.
Esto es parte del "corset" que en realidad termina impidiendo, que, en ciertas frutas, la producción pueda invertir en nuevas variedades, una exigencia de los mercados, dicen fuentes inobjetables.
No tendrá que ver con que otros países de la región tienen economías más estables y pueden aprovechar mejor esos acuerdos comerciales?. “Los Acuerdos de Libre Comercio pueden establecer mejoras en el acceso a los mercados, pero se hace imposible competir frente a países que tienen mejor acceso a crédito y costos laborales mucho más bajos. Además, cuando la economía se estabiliza en la Argentina, los gobiernos atrasan el tipo de cambio y es inviable la exportación. Las promesas de bajar impuestos y los costos laborales no llegan a la realidad”, añaden.
Ante la comparación con Chile, desde economistas a políticos tradicionalmente señalan algo así como que: “Chile exporta muchos productos básicos y tiene políticas de apertura comercial porque es un mercado chico, mientras que la Argentina debe proteger su mercado interno y la exportación queda en un segundo plano”. Incluso sobre esta idea se plantearon políticas en cuanto a que promover la exportación encarece los productos para el mercado interno. Esto, dicen referentes del sector frutícola, es una falacia total. Al tener tanto volumen, países como Chile tienen ventajas y amplían su presencia con nuevas frutas. "Son países que les interesa producir. Incluso la Argentina es un mercado ínfimo si se ve la potencialidad de exportar a Brasil, EE.UU. o China. Más allá de la estabilidad económica, Chile promueve los negocios internacionales y asumió la visión de que vender a un mercado de mil millones de personas es más negocio que a uno de 30 millones. Además, el esquema de precios es al revés. Mientras más se exporta, más barato es el producto en el mercado local”, agrega la fuente.
Nos da el ejemplo de un cluster argentino de exportación tradicional, como la pera, que produce para diversos mercados hace años, frente a un consumo local muy chico. Se exporta 90% de la producción. Al mismo tiempo; cuál es la fruta más barata en el Mercado Central?: la Pera. Mientras más oferta, más bajos los precios; contrariamente a las políticas intervencionistas de tantos gobiernos que dicen que es mejor cerrar la exportación para que no suban los precios internos. Una receta que puede servir sólo en el cortísimo plazo, agregan. “En Chile la fruta vale la mitad que en Argentina, porque las segundas o terceras calidades que son espectaculares, son baratas porque genera miles de millones de dólares en exportaciones de fruta. El secreto es tener una escala muy grande y eso genera excedente y mejores precios”, añade la fuente.
Así en Argentina, al parecer un costo laboral enorme - hoy récord- más alta carga impositiva que este gobierno anuncia reducir, constituye una tormenta perfecta para distintos sectores como el frutícola, y que para muchos, hace inviable la producción y la exportación.
Se disuelve AGP para ser la ANPyN?
Como la forma de comunicar las decisiones del área naviera y portuaria de la administración nacional actual es "disruptiva" por llamarlo de alguna manera; se duda entre informaciones que pueden ser o no"fake" o globos de ensayo.
Lo cierto es que se puede venir lo que se decía en los viejos tiempos “una noticia bomba” en la actividad portuaria y de navegación. Esto es, si se concreta en decreto el borrador del proyecto que anda dando vueltas sobre la creación de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación como continuidad de las funciones de la subsecretaría de Puertos y Vías Navegables y absorbiendo las funciones de AGP, que quedaría disuelta. O será que su gente quedará en la Agencia con menos personal?
El borrador/proyecto que circula surge de la propia SPyVN elevado a Transporte – raro que el propio subsecretario del área sea quien tenga la iniciativa que elimina su función- llevaría a esta Agencia a ser autoridad portuaria nacional, manejar tanto la concesión de las hidrovía troncal y la administración del puerto de Buenos Aires, entre otras cosas. Podría ser un buen momento para tirarle Puerto Nuevo a la ciudad como moneda de cambio, pero las relaciones políticas entre Nación y Ciudad parecen congeladas.
Además, el cambio de la "Subse" a la Agencia es crítico, justamente en el momento en que se plantea la licitación de la concesión de la Vía Troncal, pliego ideado por la gente de AGP.
La idea de la creación de una Agencia que unifique la autoridad portuaria tienen décadas, pero parece que el momento que se elige resultaría parte de las movidas de prensa de medios masivos contra la gente de AGP que se está dando desde hace unos días.
Será otro golpe sobre dicha Sociedad Estatal, esta vez mortal, que pudo sobrevivir a la desregulación de los ´90?. En ese momento, a través de la Ley de Puertos, se le sacó el manejo de los puertos al Estado Nacional que AGP detentó por décadas. De hecho quedó sólo con la administración de Puerto Nuevo y se sumó con el gobierno anterior, la concesión estatal de la hidrovía y la vocación de volver a sus días de esplendor